Sé que este blog probablemente alborotará muchas plumas, pero escúchame. Lee esto sin juzgar y no pares hasta leerlo hasta el final. Entonces, si no estás de acuerdo conmigo o odias lo que he dicho, que así sea, pero dame la oportunidad de explicarte...
Dios creó todo en el universo, desde el microbio más pequeño hasta el mamífero más grande y, por supuesto, el universo mismo. Entonces sí, todos son hijos de Dios, desde el mejor hasta el peor. Ahora no me malinterpretes, sé que hay personas que no creen en Dios y sé que hay muchas religiones y creencias diferentes en el mundo, pero independientemente de sus creencias, Dios los creó y son sus hijos. Cuando una persona se convierte en padre, sus hijos, no importa si son buenos o malos, son sus hijos. No dejas de amar a tu hijo solo porque es malo o no te ama. Amas a tu hijo hasta tu último aliento y más allá.
Dios nos creó a todos y nos ama sin importar si lo amamos o no. Como un padre amoroso, Dios está esperando que regresemos a casa. Y como cualquier otro padre, Dios no controla nuestras acciones, somos responsables de nuestras acciones y de nuestros pensamientos y creencias. Como cualquier otro padre, Dios simplemente nos muestra el camino correcto y depende de nosotros elegir el camino que deseamos tomar, el suyo o el nuestro….
Dios no puede “obligarnos” a cumplir sus órdenes, como tampoco usted puede obligar a su hijo rebelde o difícil a hacer lo que usted quiere. Pero al igual que Dios, el hecho de que tu hijo no haga lo que tú quieres no te impide amarlo o llamarlo tu hijo. Entonces, ¿por qué Dios no amaría a aquellos que no necesariamente lo aman o reconocen? ¿Por qué no los llamaría sus hijos? En mi opinión, no lo haría.
Creo que Dios ama a todos sus hijos independientemente de sus creencias, actitudes, errores u obediencia. Como cualquier Dios padre, también tiene límites, reglas y consecuencias por nuestras malas acciones. Cada padre tiene reglas para sus hijos; límites para mantenerlos seguros y reglas para evitar que dañen o dañen a otros. Cada padre tiene consecuencias por la desobediencia de sus hijos, entonces, ¿por qué Dios no tendría consecuencias por nuestras malas acciones?
Para mí Dios es el Padre perfecto y por eso creo que Dios ama a Todos sus hijos no sólo a algunos. Lo realmente importante es que Dios siempre está ahí para nosotros, esperando que vayamos a él y tengamos una relación con él. Está esperando que todos sus hijos regresen a casa, sí, incluso los rebeldes, testarudos e ingobernables. Él está esperando que lo reconozcamos, y creo que cuando un niño rebelde muere sin reconocerlo, Dios llora porque todavía amaba a ese niño aunque el niño no lo amaba y lo extraña porque ese niño nunca volverá a casa. Dios celebra cuando uno de sus hijos regresa a casa con él, pero llora cuando uno no lo hace.
Quizás pienses que estoy loca, pero que así sea. Creo en Dios con todo mi corazón y sé que cuando regrese a casa habrá una celebración. ¿Dios celebrará tu regreso a casa o llorará? Piénsalo……
Autora: Bernice Barnes
Comentarios