“Encomienda al Señor todo lo que hagas, y Él establecerá tus planes”. Proverbios 16:3
Meditación; ¿Alguna vez ha elegido un determinado camino, solo para luego arrepentirse de esa decisión? Enfrentarse a las encrucijadas a veces puede parecer abrumador, pero tenemos un Dios que todo lo sabe para guiarnos. Por lo tanto, debemos prepararnos sabiamente de antemano para las decisiones que debamos tomar rápidamente.
Las Escrituras son nuestra principal fuente de dirección y sabiduría. Si estudiamos, memorizamos y meditamos en la palabra de Dios, Él traerá la verdad a nuestra mente en el momento apropiado. Además, tenemos Su Espíritu que mora en nosotros para guiarnos. Los cristianos que tratan de sopesar los pros y los contras se pierden el sabio consejo del omnisciente.
También es aconsejable ser consciente de nuestro estado mental a medida que nos acercamos a las decisiones.
El acrónimo; DETENER.
1. Hambre, bajo la influencia del alcohol, drogas, etc.…
2. enojado
3. Solitario, deprimido, asustado, ansioso, etc.…
4. cansado
Cuatro estados en los que es más probable que tomemos malas decisiones. Al considerar las opciones, vale la pena esperar hasta un momento más favorable.
Tus elecciones afectan la dirección de tu vida, así que considera CUIDADOSAMENTE lo que el Señor quiere que hagas. La Escritura es clara en que percibimos oscuramente (sin ver claramente). “Por ahora vemos sólo un reflejo como en un espejo; entonces nos veremos cara a cara. Ahora que sé en parte, entonces conoceré completamente, así como soy completamente conocido”. 1 Corintios 13:12 Pero
Dios ve el cuadro completo. Por eso es vital confiar en Su Sabiduría, Verdad y Dirección al tomar decisiones.
Oración;
¡Padre que estás en el cielo, concédeme la serenidad para aceptar las cosas (personas, eventos, pérdidas, malas decisiones pasadas...) que NO PUEDO cambiar, el valor para cambiar las cosas que puedo... y la sabiduría para reconocer la diferencia...! En el nombre de Jesús, ¡Amén!
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