“Dad gracias al SEÑOR, porque Él es bueno. Su AMOR perdura para siempre.
Dad gracias al DIOS de los dioses. Su AMOR perdura para siempre.
Dad gracias al SEÑOR de señores. Su AMOR perdura para siempre. Al único que hace grandes maravillas. Su AMOR perdura para siempre…
al que dividió el Mar Rojo en dos. Su AMOR perdura para siempre…
al que guió a su pueblo por el desierto. Su AMOR perdura para siempre. Se acordó de nosotros en nuestra condición humilde. Su AMOR perdura para siempre.
Y nos libró de nuestros enemigos. Su AMOR perdura para siempre. El que da alimento a toda criatura. Su AMOR perdura para siempre.
Dad gracias al Dios del cielo. Su AMOR perdura para siempre.”
Salmo 136
Meditación:
Cuando éramos pequeños, a todos nos enseñaron a decir por favor y gracias, pero como adultos, a veces lo olvidamos.
Este salmo nos recuerda que le debemos a Dios un agradecimiento por todo lo que tenemos.
La gratitud es muy importante, pero a menudo olvidamos que es Dios quien nos provee lo que necesitamos. Cuando las cosas van mal, o cuando queremos algo, no tenemos problema en pedirle a Dios que intervenga y nos provea lo que queremos. A veces nos enojamos con Dios cuando las cosas no salen como queríamos, cuando Dios dice que no o quizás más tarde, pero...
¿Con qué frecuencia nos acordamos de decir gracias?
Bernice y yo celebramos cada mañana con una oración de agradecimiento por el don de Dios de la vida y las bendiciones.
Cuando las cosas van bien, también podemos olvidarnos de Dios. ¿Alguna vez pensamos que el hecho de que las cosas vayan bien son el resultado del AMOR y la bondad de Dios?
En todos los momentos, buenos y difíciles, después de nuestra oración de agradecimiento, Bernice y yo nos enfocamos en contar nuestras bendiciones y estar agradecidos. ¡Esto nos trae mucha alegría y paz interior! Y recordamos decir gracias todas las noches antes de irnos a dormir. Encontramos paz en una actitud de Gratitud que hemos desarrollado a través de los años.
Dios no nos va a lanzar un rayo si nos olvidamos, pero sabemos que nuestra vida es más pacífica cuando recordamos.
La gratitud es un hábito o actitud que todos deberíamos desarrollar y nos ayuda a reconocer cuánto más tenemos en comparación con lo que nos falta. Nos ayuda a enfocarnos en lo positivo en lugar de lo negativo y eso nos lleva a una vida más alegre y pacífica. Todos sabemos que Dios nos ha salvado, pero ¿pensamos también en los pequeños regalos que nos da cada día? Recordemos siempre decir gracias.
Cuando sentimos que no podemos, ¡nuestro Dios sí puede!
ENFOQUEMOS en ÉL. Él está renovando nuestra FE, ESPERANZA, CONFIANZA y AMOR en ÉL...
Elijamos la FE en lugar del miedo... Con el hombre lo imposible no es posible, ¡pero con Dios todo es posible!
Oración:
Abba, Padre, ¡gracias por tu presencia permanente y por darnos tanto! En primer lugar, ¡la salvación y la vida eterna por medio de Jesús! Es fácil pensar que las pequeñas victorias que obtenemos cada día son obra nuestra, pero sin ti, no podemos hacer nada. ¡Continúa capacitándonos para hacer tu voluntad con alegría y gratitud; para compartir el Evangelio con todos! Oramos en el nombre de Jesús. ¡Amén!
José Reyes
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