Oportunidades preciosas
Cada mañana cuando me despierto
Doy gracias a Dios por un día más...
otra oportunidad para decirle a la gente que los amo...
otra oportunidad de marcar la diferencia en la vida de otra persona
ya sea con una sonrisa, una palabra amable, un abrazo
o apretón de manos.
Otra oportunidad para terminar
el trabajo que me enviaron a hacer
sea lo que sea
la mayor parte del tiempo no tengo ni idea.
Otra oportunidad para disfrutar
el sol, las nubes, los pájaros,
los árboles, la tranquilidad
y las multitudes.
Otra oportunidad para explorar, aprender,
enseñar, cuestionar y buscar
tu sabiduria y gracia
para prepararme para el día que llegaré a verte
cara a cara.
Meditación:
Cada vez que me despierto con dolores y molestias pienso en este poema que escribí en uno de mis días "malos" y recuerdo lo agradecida que estoy de estar viva. Nunca deja de sorprenderme lo egoístas que somos. Nosotros, como humanos, siempre nos estamos quejando de algo y queriendo más de lo que tenemos. Incluso aquellos de nosotros que no tenemos nada y estamos agradecidos por todo, sí, incluso esas personas son minuciosamente egoístas. Subconscientemente desean algo más o mejor en su vida o en la vida de sus seres queridos.
Tengo un pensamiento simple sobre cómo vivir una vida simple y plena.
1) Nunca esté demasiado ocupado para un abrazo o un apretón de manos de nadie.
2) Siempre dale un beso de despedida a tu mamá, abuela o familiar antes de irte.
3) Siempre dé las buenas noches a sus seres queridos y béselos antes de acostarse.
4) Nunca te vayas a la cama enojado (solo provoca insomnio).
5) Siempre agradece a Dios por tu día sin importar cuán bueno o malo haya sido.
Estas pueden parecer reglas locas, pero si las sigues, estás en el camino del amor y el desinterés. Cuando se toma el tiempo para hacer estas pocas cosas simples, se olvida de "usted" y recuerda a los demás. Esto es hacer la voluntad de Dios.
“Hijitos mios,que nuestro amor no sea solamente de palabra, sino que se demuestre con hechos. 1 Juan 3:18
Oración:
Dios, ayúdame a ser la persona que me creaste para ser. Ayúdame a ayudar a los demás y hacer tu voluntad no la mía, hoy y todos los días en el nombre de tu hijo Jesús, pido que se haga tu voluntad. Amén
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