“FE - Temor”

Dios es nuestro amparo, nuestra fortaleza y nuestro pronto auxilio en los momentos difíciles. Por tanto, no temeremos, aunque la tierra ceda y los montes se hundan en el corazón del mar, aunque sus aguas bramen y se estremezcan, y los montes tiemblen con su furia… El SEÑOR TODOPODEROSO está con nosotros; el Dios de Jacob es nuestra fortaleza.

Salmo 46

Un día, Jesús dijo a sus discípulos: «Pasemos al otro lado del lago». Así que subieron a una barca y partieron. Mientras navegaban, él se durmió. Una borrasca azotó el lago, de modo que la barca se inundaba y corrían gran peligro. Los discípulos fueron a despertarlo, diciendo: «¡Maestro, Maestro, nos vamos a ahogar!». Él se levantó y reprendió al viento y a las aguas embravecidas; la tormenta amainó y todo quedó en calma. «¿Dónde está vuestra fe?», preguntó a sus discípulos. Con miedo y asombro, se preguntaban unos a otros: "¿Quién es este? ¡Él manda incluso a los vientos y al agua, y le obedecen!".

Lucas 8:22-25

Meditación:

Los apóstoles habían pasado tiempo con Jesús escuchándolo hablar sobre el Reino de Dios, sanando a quienes sufrían enfermedades físicas y espirituales, y ahora navegaban con él por el mar cuando se desató la tormenta. Solemos olvidar que varios de los apóstoles eran pescadores y estaban acostumbrados a las tormentas en el mar, y sin embargo, ellos también temían que la barca volcara y se ahogaran. Jesús parecía indiferente y seguía durmiendo. Sin embargo, cuando los apóstoles pidieron ayuda, Jesús respondió y calmó la tormenta.

Los apóstoles cuestionaron el poder de Jesús aun después de presenciar los otros milagros... Piensen en eso por un momento... cuestionaron el poder de Jesús, a quien habían visto sanar a los enfermos y calmar las tormentas.

Jesús les preguntó: “¿DÓNDE ESTÁ SU FE?

¿Y nosotros?

Vemos la bondad de Dios en nuestras vidas, vemos su poder en la belleza y majestuosidad de la naturaleza y, sin embargo, a menudo nos preguntamos dónde está cuando las tormentas de la vida nos sacuden… ¿De verdad creemos que podemos escapar de las pruebas y, a veces, de la persecución? Podemos ser derribados por nuestras creencias y nuestros intentos de hacer lo correcto. Sufrimos los dolores de la enfermedad, la pérdida de seres queridos y los problemas que trae la vejez… ¿Pensamos que Jesús duerme en la popa de nuestra barca o nos acercamos a él sabiendo que está ahí esperando que le pidamos ayuda?

“Les he dicho estas cosas para que en mí encuentren paz. En este mundo tendrán aflicción. ¡Pero anímense! Yo he vencido al mundo.” Juan 16:33

Elige la FE y la CONFIANZA en lugar del miedo, la preocupación y la ansiedad… JESÚS ES TODOPODEROSO; no solo puede, sino que calma las tormentas de la vida…

Hay un poema llamado "Huellas" que habla de esta actitud de incertidumbre sobre el cuidado de Dios por nosotros. En él, el poeta se queja de ver las huellas de Jesús caminando con él en momentos de alegría, pero no en momentos de dificultad. Jesús señala que solo ve un par de huellas en los momentos de tristeza porque "ÉL" lo lleva. 

Siempre podemos confiar en que Jesús estará con nosotros.

Oración:

DIOS MISERICORDIOSO Y PODEROSO, ayúdanos a seguir confiando en ti y a sentir la PAZ que Jesús da en medio de las tormentas de la vida. Llena nuestros corazones con tu ESPÍRITU SANTO, para que te sintamos en nosotros. Danos la GRACIA de saber que siempre estás a nuestro lado. Ríete con nosotros en los buenos momentos y apóyanos cuando nos sentimos agobiados o temerosos. Renueva nuestras fuerzas para seguir proclamando con alegría el Evangelio a todas las naciones. En el nombre de Jesús, oramos. ¡Amén!

José Reyes.

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