Un amigo Ama en todo momento, y un hermano nace para un momento de adversidad. Proverbios 17:17
Meditación:
El amor que le das a otras personas debe ser capaz de resistir todas las estaciones. La gente tiende a cometer el error de pensar que el amor se trata solo de sentirse bien. Creen que el amor se trata de los buenos momentos y nada más. Pero eso no podría estar más lejos de la verdad. En las amistades, la familia y otras relaciones significativas, también necesitará amor para ayudarlo en los momentos difíciles. Los tiempos difíciles también tienden a llegar con más frecuencia de lo que esperamos. Los desafíos vienen en diferentes formas y tamaños y siempre llegan cuando menos lo esperamos.
El amor que tienes por tus amigos y tu familia no debe ser condicional o estacional. Tienes que entender que la gente te va a defraudar en la vida, te guste o no. En lugar de excluirlos, elige amarlos y perdonarlos por sus defectos. También tenemos que reconocer el hecho de que nosotros mismos no somos perfectos y también cometeremos errores. En esos momentos, también esperarás amor y perdón. Es muy fácil juzgar a los demás cuando eres tú quien está en lo alto.
El amor te mantiene unido cuando parece que se ha perdido toda esperanza. En el mundo en que vivimos, no es muy difícil perder la esperanza. La Violencia, las pérdidas, las enfermedades mentales y físicas, los desastres naturales y económicos que ocurren a diario, son suficientes para debilitar hasta los corazones más fuertes. Pero es por eso que tenemos amigos y familiares, para superar todo juntos. Nadie nació para ser una isla. Hemos sido bendecidos con el don del compañerismo para que podamos amarnos unos a otros en los grandes momentos y en las tormentas. El amor es suficiente para darle a una persona el impulso que necesita para continuar con su día.
El amor es más que suficiente para recordarle a una persona a Dios y su bondad. Nunca debemos permitir que la dureza entre en nuestros corazones porque puede causar la destrucción de cualquier vínculo significativo en nuestras vidas. Continúe permitiendo que el amor de Dios fluya a través de su corazón y en la vida de las personas que lo rodean. Al hacerlo, ellos harán lo mismo por usted, y todos descubrirán que pueden capear la tormenta juntos.
Oración:
Padre nuestro que estás en los cielos Gracias por amarnos. Ayúdanos a difundir el Evangelio de tu HIJO y tu Amor a todos, con palabras y acciones. En el nombre de Jesús, oramos. ¡¡¡Amén!!!
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